miércoles, 30 de octubre de 2013

TAN LEJOS DE DIOS Y TAN CERCA DE EE UU. (MEXICO I)

México en el corazón siempre, incluso ahora en el momento en que, tras evocar sus grandezas y generosidades, me llega el estruendo de la violencia de los narcos en Michoacán y la réplica del ejército. Años atrás nos llegaban las mujeres asesinadas de Chiapas, las tumbas del desierto,  que dio origen a una de las escenas más terribles y hermosas del teatro de Alex Rigola con texto de Roberto Bolaños, 2666. Qué rara ley indescifrable une la belleza,  la grandeza y el misterio de una gran nación, a la sangre y la violencia. México ha mamado mucho de esto en las fuentes de  la llamada madre patria .Hasta la banda en armas se llama Los Caballeros Templarios. Ignacio García tiene razón al darle ese sesgo de actualidad a la obra de Bergamín, La sangre de Antígona, en la que participa la UNIR. Vuelvo a recordar la vieja oración: "México, tan lejos de Dios y tan cerca de los EE UU". Recuerdo Sed de mal de Orson Wells; recuerdo,  hace unos meses, Arizona, de Juan Carlos Rubio, dirigida también por Ignacio García y magníficamenente interpretada por Aurora Cano y Roberto Calva, lo cual  nos lleva a los periodistas españoles García Garzón, (ABC) Justo Barranco (La Vanguardia), Miguel Ayanz (La Razón), Cesar López (El Periódico) a hablar de teatro, de actores y actrices,  de qué si no. A Rosana Torres (El Pais) la echamos de menos; al parecer sigue en coma. Un beso.

Me recuerdo con Ana hace 25 años en las viejas fotos de papel de las que nunca nos separaremos salvo con la muerte. Cuernavaca, Guadalajara, Chichen Itzá,  Chiapas. Fotos en el Zoco, rodeados de proclamas indigenistas, fotos ante los grandes monumentos al Sol y a la Serpiente Emplumada con un guia imponente como un  Dios,  "mero descendiente de Moztezuma". Y los murales de Rivera, Siqueiros, Orozco. A Siqueiros casi llegué a perdonarle que, por culpa de su estalinismo bestia, ametrallara a Trotski, aunque no pudiera acabar con él, labor que remató más tarde el español Ramón Mercader  Recuerdo el pánico   de   Javier Armada, compañero de la Escuela de Periodismo y cónsul entonces de España en DF, cuando le dijimos que queriamos recorrer el país de costa a costa y, además conduciendo Ana un coche alquilado y sin pistola, naturalmente. No pánico, terror sintió Javier Armada. Y nos ofreció, para compensar,  hacer una excursión, a Queretaro,  en la que yo me ponía ciego de mezcal como el cónsul de Malcolm Lowry en Bajo el volcán. Éramos más jóvenes y hasta yo, que nunca he sido un Allain Dellon, como me sugiere A. de Tocqueville, era más guapo. Ana resultaba  fascinante y más cuando perpetraba esos arranques aventureros de exploración conquistadora, o los ghetos de las galleras y la lucha libre. De verdad, creánme, nosotros los de entonces, ya no somos los mismos, aunque Ana conserve mucho de su misma mismidad.

Tras el estreno de La sangre de Antígona  comento de pasada estas cosa con Miguel Arrufat Consejero Delegado de UNIR al que le gustaría ver la corrida de la México. Vano intento; ni siquiera José Mata y Rudi, de Los toros en el Mundo, pueden hacer  nada; sólo queda  gallinero,   inaccesible en la MéxicoEn otra mesa, López Antuñano, Esperanza D,Ors, Ignacio Amestoy; y el Estado Mayor de la UNIR, Carlos Mayor, Presidente, finura de diplomático; y José María Vázquez, mesura y discreción de Rector .

 Lo he pasado en México mejor que el sufriente y triste Eugenio Noel cuyo Diario íntimo, editado por Almuzara tengo delante. El pobre Eugenio Noel solo ve en Mexico, hostilidad, miseria, canallismo, sobre todo por parte de la colonia española y en eso acasa tenga razón; la colonia española era la que era, el don Celes, de Tirano banderas:  tenderos, avaros, prestamistas, gachupines. Por encima de su antitaurinismo y su antiflamenquismo, Eugenio Noel tenía enquistada su condición de escritor menor del 98. Eso, unido a un ego muy desarrollado  y una soberbia de misionero redentor, configuró una personalidad devastadora, sobre todo para él mismo. Se pasa el tiempo ensalzando  su exceso de talento y su escasez de dinero. No hay página de su estancia en Máxico de este Diario íntimo  en  la que no recuente sus dineros y su gastos, fuente de todas sus desventuras, con una patética reiteración: en pesos, en pesetas, en dólares.  Y los grandes éxitos de sus conferencias sin público y que apenas le pagaban. Hay que leer su Diario íntimo, novela de la vida de un hombre. Planeo una guía para leer a Eugenio Noel, y puede hacerse a partir de este diario.. Planeo también una guía para leer a Chaves Nogales, más allá de su Belmonte mítico. Y puede hacerse a través de los libros que está publicando Almuzara Andalucía Roja´o el más reciente, Los enemigos de la República, por ejemplo.

jueves, 24 de octubre de 2013

RUMBO A MÉJICO; CON BERGAMÍN A LA MÉXICO

Me llaman los amigos taurinos de México, me apremian: dejate de teatros hermano, el domingo en la Mexico a ver toros. Veremos, aunque habrá tiempo para todo; Me atrae el montaje de La sangre de Antígona y esa reunión de críticos que ha montado la Unir, con Ignacio Amestoy a la cabeza. Me atrae por supuesto la huella de los exiliados españoles en México y Cárdenas que los acogió: las tribulaciones  de La España peregrina, acuñación bergamasca, como la autoría de La sangre de Antígona; siempre las víctimas sin enterrar, el derecho a sagrado que  le niega el tirano a una de las víctimas, la otra no; la otra recibirá todos los honores. Y la insurgencia de Antígona, la rebelión de Antígona; qué metáfora de las guerras fratricidas, antes  de llegar a "la memoria histórica", concepto que reabría heridas sin cicatrizar aún. Dejemos la historia para después de la representación.
No damos  abasto al teatro que hay en Madrid y nos vamos a ver teatro a México. Evoco Nada tras la puerta de cinco magníficos autores: Juan Cavestany, José Manuel Mora, Borja Ortiz de Gondra, Yolanada Pallín, Laila Ripoll. Buenos textos, duros, erizados, cruentos. Con todo, lo mejor la dirección  de Mikel Gómez de Segura; un trabajo muy inteligente de dramaturgia y ensamblaje. La individualidad de cada texto desaparece para formar parte de un todo orgánico, como si fuesen obra de una sola mano. Y en verdad es así, la man de Gómez de Segura. Merece la pena volver sobre este trabajo que demuestra con contundencia una verdad sacrosanta y acepta: un texto no es teatro  hasta que se pone de pie en un escenario.

Recuerdos de Vázquez Montalbán,  a los ¿diez años? de su muerte. Ví a Jesus Nieto que venía de correr, sudoroso, y le recordé lo que decía Vázquez Montalban: "las cunetas están llenas de cadáveres que murieron mientras corrían". Obviamente el magnífico periodisra, el mejor de estos tiempos con Francisco Umbral,  sólo era aficionado al deporte de la buena mesa; y murió solo en un aeropuerto lejanísimo, como el personaje de una de sus novelas de la saga Carvalho. La vida, y más la muerte, es una cabronada. A Jesús Nieto, periodista aficionado a la poesía  y no sé si también poeta, le recuerdo una crítica que MV me hizo en El Jueves, me parece recordar: "este poeta nunca ganará el Adonais: hay que leerlo". Y firmaba Manolo V el Empecinado. Evidentemente nunca gané el Adonais. Pero conozco a algunos  amigos que lo ganaron, o estuvieron a punto de ganarlo, y son buenos poetas.

Libros para el viaje a México: La hora del lobo, de Javier Magano, que me sigue fascinando. La estética de la resistencia, de Peter Weis, editado por Hiru. Y Yo maté a Kennedy, de Vázquez Montalbán, relectura obligada  después de ver Los hijos de Kennedy,  en El Alcázar. Sospecho  que Yo maté a Kennedy me va a gustar más de lo que me han gustado los hijos.

QUERIDOS CÓMICOS; OTRA VEZ EN EL GIJON, PERO SIN TOREROS.

He vuelto a almorzar en el Gijón; sin toreros. Está claro que lo de los toreros vende cada vez menos. Talavante y Curro se han ido a Méxixo. Los veré allí. Vuelvo al Gijón con gente de la farándula. Parece que  volviera a recuperar mi vida golfa, -golfos de bien tituló      Lauro Olmo,-  en el Café. Pepe Bárcenas  sigue inventándome historia maravillosas que me halagan y enaltecen Los cómicos cabreados; no se explican cómo un buen montaje, aunque insuficiene, de El caballero de Olmedo, no lleve gente al Fernán Gómez y que, sin embargo, Los hijos de Kennedy esté reventando la taquilla. Prometo ver lo del Alcázar. Lo he visto a estas horas de madrugada. Ya hablaremos, pero supongo  que un cartel con  Pou de director y con Emma Suárez, Verdú,  y la, para mí, sin par Ariadana Gil   explica muchas cosas. Así se las ponían a Fernando  VII. Indago en las razones de porqué El caballero....no lleva gente. Está claro; Mariano de Paco ha pinchado; puede ocurrir y un borrón lo echa el mejor escribano; y Mariano, al que sigo con fervor desde los tiempos de "alternativo", ha echado un borrón. Le queda su gran prueba de este año, Carlota en el CDN. No puede permtirse más borrones. Alguna gente de su equipo suspira, aunque no comparte mi opinión. Alguien me dice, "que tu amigo Ruperto Merino no nos baje la subvención, porfa". Ojala no, pero yo no tengo poder sobe mi amigo Ruperto Merino  ni sobre ningún político; os habeis equivocado de ventanilla, decídselo a Luis María Anson.  Aparece en traje de deporte, corriendo y sudando, Jesús Nieto, un ambraliano visceral: umbralianao, vale; pero  no dejes que te llamen umbralito; no es malo, pero suele incluir un matiz de mala leche. De mí dijo un dia un torero sindicalista cuando le hice una mala crítica: "Aspira a ser Umbral y se ha quedado en umbralito". Le respondí: "es preferible aspirar a Umbral y quedarse en umbralito, a aspirar a torero y quedarse en Raúl Galindo". Pepe Dominguín me echó la bronca, joder Javier que este hombre es sindicalista. Y yo le contesté, Pepe "qué tienen que ver los cojones para comer trigo".

Vuelvo donde interrumpí ayer el blog; el almuerzo de anteayer con Jiménez Precioso.  A la mierda el teatro, eso lo digo yo con escándalo de Amado. Y entonces saltan los años sesenta del Café, el tardofranquismo, la Falage social y antifranquista; la censura.....horrible marca de un régimen policial, Pero, desaparecida aquella lacra ¿cuántps genios aparecieron?. Es sorprendentet lo que puede dar de sí  un charla con un buen vino delante.

No quiero que pase este trozo de blog sin un comenario que vengo prometiendo; Júbilo terminal.  José Pedro Carriónes no sólo un gran actor, sino una escuela de interpretación condenada a la desaparición; !que dios no lo permita! Y Valery Tellechea amenaza con ser una especie de heredera colateral. No sé dónde andan ahora, pero los seguiré donde vayan con  Jubilo terminal. Y los seguiré porque, al seguirlos, persigo a Hamlet, Cyrano, Puck, Ricardo III . Lear.....  O sea la mejor historia de la humanidas. Y también seguiré    a  Julián Ortega en La tigresa  de Dario Fo. Ortega no es Darío, pero vale; no se lo pierdan esté donde esté. Porque ya no está en El sol de York, sala que no hay que perder de vista. Mi querida     Alexis les dirá dónde encontrar a la tigresa, Dario Fo, Carla Mateini y Ortega.  Me voy a México.

miércoles, 23 de octubre de 2013

CURRO VÁZQUEZ Y TALAVANTE EN EL CAFÉ DE GIJON; NOS VEMOS EN MÉXICO (I)

Las once de la noche del martes

Horroroso dia para andar por Madrid;  lluvia fuerte y taxistas maldicientes. Llego pronto al café de Gijón donde he quedado para almorzar con  Amado Jiménez,el mandamás de cultura de la Comunidad de Madrid. En esa hora que media entre mi llegada y la aparición de Jiménez me ha pasado de todo, menos recuperar la vida libeertaria y un poco golfa  de hace siglos del Gijón.  A la entrada me he chocado  con un político en declive, poeta no lo fue nunca; y aunque se arrimaba todo  lo que podía  a las chicas de la farándula, nada  se le pegó del teatro; anda todavia por los arrabales del poder, tiene cierto mando quizá por las cloacas del Psoe, via sindicalista, pero en el fondo es ceniza y escombros; la cara se le está cayendo a cachos. Después de esta descripción, que nadie me pida su nombre; piedad con los vencidos aunque conserven algún poder crepuscular. Mi viejo "amigo" esquiva el encuentro y  dobla la esquina de la calle Prim. Quizá tema que le pida algo o le recuerde algo; quizá piense que voy a demandarle alguna prebenda o privilegio por viejos tiempos. Se equivoca; yo a las gentes, y mucho menos a los políticos, nunca les pido nada para que luego no me atraquen; en cualquier caso, si algo pedí alguna vez siempre devolví más: sin aspavientos gesteros.

Tras este encuentro esquinado -lagarto,lagarto - Pepe Bárcenas, el camarero ilustrado y escritor, me da una buena notica: "al fondo hay un amigo tuyo". Miro y el amigo es Curro Vázquez; y con él Alejandro Talavante. A Curro le hice quizá el mejor libro de toros,  de todos los que he escrito: Curro Vázquez, sombra iluminada. A Talavante le he escrito algunas letrillas, aunque él no lo sabe; se las ha cantado María Toledo y es probable que Talavante ni se haya fijado en las letras, anónimas por otra parte. A mí, en Las Ventas, María Toledo me cantó uno de mis poemas por  bulerías de soleá  y ni me enteré; sólo tenía ojos para ella. Curro y Talavante se van a México a inaugurar la temporada en DF el domingo; yo me voy a cosas de teatro con la Unir. Amestoy y María Luengo temen que me escape a la corrida y deje lo de Bergamín y MaxAub, después de pagarme el viaje. Palabra que no; llego a un acuerdo con Curro y Talavante; la Unir les invita al estreno  de  La sangre de Antígona y ellos me invitan a la corrida del Domingo. Trato hecho.

Llega  con puntualidad casi inglesa Amado Jiménez; elegante y con paraguas;  cosmopolita bajo la lluvia y una viaje memoria de trotamundos ministerial. Reconoce el Gijón, una lejana juventud. Me sorprende su conocimiento de la noche madrileña de los años 60. Me sorprende su disimulada melancolía de viejo rokero del Gijón. Llega Aquiles Tuero, el de la Opera, un asturiano que lleva 30 años en Nueva York. Viejo amigo y por eso me lee; dice: "de teatro, todo. De toros lo que me aconseja Rubén Amón que dice que eres el más sabe de toros". No creo que Amón diga eso, pero yo sí afirmo que de Opera sabe más que  Ulises. O, al menos, lo escribe. Solo me falta ver a aparecer a Paco Rabal, a María Asquerino,  Luis Gómez El Estudiante, torerísimo como siempre, De golpe....todo un mundo que vuelve.

Mientras escribo suena el teléfono, las 11 de la noche. Me llama  desde Valencia Juan Manuel Mompó. Más de una hora de telefono. Toros, siempre toros; y esta vez un emocionante viaje que ha hecho a Roma. Conoce mis entradas de blog sobre el Papa Francisco... Seguiré mañana. La comida con Amado Jiménez, los encuentros con Curro, Talavante y Aquiles., esta llamada de Juan Mompó dan para mucho. Corto y cierro y repaso  los temas con los que pensaba  cerrar este artículo: el libro de Manuel Cerdán sobre las claves de la voladura de Carrero que acabo de recibir, Dario Fo y la tigresa, de Julián Ortega, el jubilo terminal de Valery Tellechea y  José Pedro Carrión . Javier Magano y su hora lobuna...Bueno,  será luego.   Habrá segunda parte..  

lunes, 21 de octubre de 2013

MALDITO LUNES SIN TEATRO NI NADA

Crónica de una mala tarde.

Lunes, la gente de la Farándula descansa y una tarde sin teatro es una tarde muerta. No puedo imaginarme un mundo sin teatro. Bueno, sí puedo: barbarie, devastación, soledad y pensamiento congelado. ¿Quién puede querer un mundo así?. No se devanen los sesos, miren en derredor, abran los periódicos y hallarán la respuesta. Una tarde sin teatro es una negra profecía; me imagino a las fuerzas ocultas del poder urdiendo sus estrategias sin el freno o el dique del teatro: documento, agitación, diversión,...... contrapoder. Esa es la clave: contrapoder.  Y el poder....teme el teatro como conciencia, como apertura magnífica de la mente a la revuelta colectiva. Hacen bien, señores mandamases  del sistema en temer al teatro; pero quítenle ustedes el criminal 21%  de IVA. En el fondo, la  farándula son buenas gentes, El viaje entretenido ......Perdonen, pero hay siglos en que uno no está para nada; es la hora violeta, de Montserrt Roig, es la hora del lobo de Javier Magano,  un joven poeta que acabo de descubrir, apadrinado por un poeta no tan joven que descubrí hace 40 años, Pablo Jiménez.

Yo lo que quería, de pequeño, era ser actor. Llegaban los cómicos a la taberna de mis padres, a pernoctar en unos jergones de paja o de borra,  y a hacer La pasión y Genoveva de Bravante y yo no me separaba de ellos. Hasta llegué a hacer el protagonista de San Tarsicio, el niño mártir, que por algo era el hijo de la directora  la señá Rosario y del ayudante de dirección el señor Francisco. Los cómicos y comicantas me siguieron  fascinando y luego en Barcelona, de charnego, con tal de salir a un escenario de barrio y decir, señor el café está servido,  era el muchacho  más feliz del mundo. En el fondo, mi prosa tiene un ritmo interno aprendido no solo en los clásicos, sino en los actores. Ernesto Arias  dice que mi blog suena mejor leido en voz alta. Pudiera ser. Cuando no escribía de esto, me tragaba todos los ensayos donde me dejaban entrar los amigos y vi cientos de funciones entre cajas . Muy, muy, muy, demasiado en el fondo, soy periodista y poeta por falta de talento para ser actor. Cuando veía a mis amigos y amigas que me cobijaban en los camerinos y luego me invitaban a cenar, me convencí muy pronto de que, a poco que ensayara, podía ser el peor actor del mundo. Y me dediqué al periodismo.

Bien. Venía diciendo que es La hora violeta, la difusa hora de los sueños, acaso de la tristeza o la hipocondría machadiana  que es lunes y no hay función y las salas están cerradas. Busco en la estantería el libro violeta y magnífico que, a la vuelta de un viaje a Leningrado y Moscú, me dedicó Montserrat Roig. No lo encuentro; están casi todos, pero La hora violeta, no. Alguien debió de llevárselo una noche de vinos y madrugadas sucesivas, seguro. El otro dia me declaraba ladrón de libros en épocas de penuria y Lorenzo Silva, el pontonero de la COPE, contestó en un tuiter que eso no se hace, que mejor el bibliobús. Yo nunca he robado libros en casa de amigos, eso nunca. La dedicatoria de Montserrat Roig era para Ana y para mí y tenía la complicidad del riesgo y el desbordamiento de quien acaso se sintiera ya amenazado por el cáncer.
Quizá por eso La hora violeta,  que no encuentro, empieza a convertirse en La hora del lobo, de Javier Magano. Hablaré en otro artículo de él. El libro me ha conmovido y me ha turbado, sacudido quizá por las fuentes explícitas que Magano confiesa; vean: Jean Genet, "no hay para la belleza más origen que la herida"; Baudelaire: "o vase de tristesse,o grande taciturne"; Von Platten-Hallermünde, "quien ha contemplado la belleza/ deja su suerte en manos de la muerte"; Marqués de Sade, "sostuve mis extravíos con razonamientos"....Y así. Solo un poeta me había interesado  tanto hace algunos años: Antonio Lucas, auténtica raza de poeta y de periodista. No es mala mezcla, periodismo y poesía.
Me llega un libro de Paco López Barrios sobre toros Mágica ceremonia; conociendo a López Barrios me imagino que se armará el follón. Nacionalistas, eurpeista, progres a la violeta, antitaurinos y otras especies,  querrán cortarle la cabeza, por no decir algo mucho más sensible que, en la juventud, nos interesaba, y usábamos, más que la cabeza. Este libro no irá a la Biblioteca de Colmenar Viejo, al menos hasta que lo haya leido y escriba de él. !Temblad, temblad, malditos!
Me llega una foto de un ternerillo bravo, recien puestos los crotales, de Maite Túrrez. Bajo la protección de la madre, el choto se muestra seguro y cabreado. A la defensiva. Se le ve la bravura en los ojos. Y la arrogancia. Y el desafío. Irá al Museo Taurino de Colmenar, aunque......no sé. Me fascina esta infancia brava, esa disposión a plantarle cara a la vida. No sé, no sé....Su mirada es un mundo y, a lo mejor, cuelgo la foto en mi despacho.

domingo, 20 de octubre de 2013

DESDE LA FARÁNDULA; HOLA ROSANA TORRES, DEJATE DE BROMAS.

Vamos a ver, queridísima Rosana, que yo me entere;  ¿que coños te pasa?. Porque eso de coma inducido puede decir mucho o puede no decir nada. Me informa Ignacio Amestoy; pero llamo a Borja Hermoso y no contesta a mis mensajes. Los de El Pais, como todos los periódicos oficiales de todos los regímenes,  son muy especiales y muy suyos; tú lo sabes. Pongo tweets y los de la farándula no saben no contestan. Ten cuidado, los cómicos nos adoran cuando hay estrenos, pero luego cada mochuelo a su olivo. Bastantes problemas tienen ellos para ocuparse de la salud de los demás.
Que yo me entere de una vez, ¿vienes o no  vienes a México con Ignacio Amestoy, la UNIR y La sangre de Antígona de Bergamín?. Porque si vienes, puta madre;  y todo ha sido una de las tuyas; y si no vienes, de verdad querida Rosana,  empezamos a preocuparnos. ¿Qué es eso del coma inducido y por qué?. Yo de quirófanos sé mas que tu y más que el Borbón y le aventajo, por lo menos, en dos cirugías. Eso sin que  haya ido a cazar osos borrachos,  ni elefantes en Botswana. O sea que puedes contármelo todo. Pero si no vienes a DF ¿qué hacemos con el secuestro express que teníamos planeado  tú y yo contra Amestoy, Nacho García Garzón, Guillermo Heras y Ana Merino?. Bueno,  a Ana la habíamos descartado,  porque tú y yo sabemos que, por las bravas, Ana es más peligrosa  como secuestrada que como secuestradora. Sigo manteniendo mi estrategia,  porque sigo pensando que lo del coma inducido es una broma, una puta broma, una putísima broma  de mal gusto...

A Esperanza D,Ors le exigiré por el rescate de su marido una de sus esculturas: un Icaro por ejemplo. Y por los demás, me  da igual: un par de botellas de Rioja, un gran chuletón que nos comeríamos tú y yo, con los secuestrados, en la habitación del hotel. O sea que, como secuestro express, la cosa no puede ser más inocente. Pero a tí y a mí nos queda mucho que hablar y que discutir; no me jodas. Por ejemplo, tenemos a medias la controversia sobre progresía e izquierda; yo dale que te pego que los progres son la falsificación de la izqquierda y tú que me deje de coñas, que eso no te lo digo en la calle .... Te digo esto porque acabo de ver algo que me dió mala espina no verte en ello: El rey tuerto, programado por tu adorado Juan Diego Boto, que aún me acuerdo que En un trozo invisible de este mund, te trató como a una reina, con flores y todo y tenemos que ajustar cuentas ese señor con cara de no haber roto un plato y yo, porque ese dia casi llego a cogerle tirria. Los celos son malos consejeros.   Fascinante, de verdad El Rey tuerto y espero que leas mi crítica en El MUNDO y mi artículo en Artez : para que te jodas.

También he visto Nada detrás de la puerta, y tampoco te ví alli: cinco textos de Laila Ripoll, Yolanda Pallín, Cavestany, Ortiz de Gondra y Mora; nada especial, quizá, en los textos; pero una maravilla de ensamblaje, dirección y dramaturgia. Prueba evidente de que un texto no es teatro hasta que se pone en un esenario. Puede que ahí nos hubiéramos enzarzado tú y yo.  Tenía que enseñarte, después de México, mi libro de poemas Aquelarre de sombras, lo único mio que te interesó un poco y eso  porque te enteraste de que Mayorga quería ponerlo en escena, antes de que me lo sugiriesen, Amestoy y Pérez de la Fuente y le diesen a ese desfile goyesco de espectros el Premio de la Crítica de Castilla y León. Maldita suerte la mía; a mis mejores amigas la poesía les importa un   güevo y a algunas, como a Ana, ni la poesía ni mis crónicas taurinas. A tí te gustaban estas porque siempre reconocía en ellas el magisterio de Joaquín Vidal, la única pasión que, de verdad, hemos compartido.  
Bueno, te mando un beso y déjate de coñas. Esta entrada de blog la tenía dispuesta para otras cosas; Dario Fo y la tigresa, José Pedro Carrión y Valery Tellechea, que acabaron en  El Sol de York   y andarán por ahí de bolos. Y a un libro de un joven poeta, Javier Mangano, La hora del lobo, que empieza con una cita de Genet: "No hay para la belleza más origen que la herida"; o esta otra de Baudelaire:   "O vase de tristesse, o grande taciturne". Es joven, pero acojona. Lo contaré otro dia. Ponte buena, anda. ¿Qué vamos a hacer sin tí en Mexico?. Te quedan tres dias; es un ultimatum.

viernes, 18 de octubre de 2013

CARTA A ELENA SALAMANCA

Admirada Elena;
Bien quisiera decir querida Elena, pero el escaso trato que hemos tenido no me autoriza a ello y no soy  persona de tomarsee licencias que no le corresponden. Te debo una explicación. Lo que tomé por exabrupto tuyo es impropio, obviamente, de tí. Pero en mi respuesta había cierta coña marinera que, eso es cierto, descubría mi tendencia a atribuirle a la taurinada, no a los honrados aficionados,  muchas perversidades. Si Elena Salamanca reacciona tan coléricamente alguna trastada le han hecho los taurinos para que se ponga como tan  tarasca, me dije.. Quien invoca a Hitler, genio del mal, para atacar los toros, es naturalmente una nazi y aquí no valen las metáforas; esa humanista animalista es una nazi y lo más probable es que, el olor de los hornos crematorios no le arrugue la nariz como se la arruga la sangre de los toros y el humo de los altares. Algo parecido le ocurría al mayor carnicero del III Reich, Hmmler; Invitado en el 42 a una corrida en las Ventas salió vomitando y maldiciendo la crueldad de los españoles. Quien dice que sería hitleriana si Hitler hubiera hecho con los aficionados lo que hizo con los judíos es, por naturaleza y por ideología,  nazí. Y tiene de cabecera Mein Kampf. Más le valdría  tener el Cossío y los poemas de Miguel Hernández o de Alberti, como tenemos seguramente tú y este servidor.

Achácalo todo, amiga Elena,  a la confusión de mi torpeza (llevo en esto apenas mes y medio) y a la turbación de mi admiración, que una cosa lleva a la otra y más en los tímidos como yo; veo tu nombre en un Twiter y se me borran todos los demás. Y así, interpreté por tuiteo lo que era un retuiteo, pues  es sabido que el gato lleva al rato (ratón) y así sucesivamente, según la retahila cervantina. 

Y de tí paso a un gran actor Israel Elejalde al que aconsejo que no confunda el culo con las témoras ni la gimnasia con la magnesia. Me explico, admirado amigo: lo de Wert y Montoro es un delito de  lesa democracia y respecto a ellos, se callarán los políticos pero muchos no nos hemos callado ni nos callaremos. Lo de un señor que quiere imponer el catalán en Gijón es la soplapollez de un desesperado sin contratos. Defendí a Pepe Rubianes y llegué a pedir la dimisión de Gallardón, Alicia Moreno y Mario Gas. ( ver El MUNDO de aquellos dias). Pepe Rubianes era muy buen actor. En la cuestión catalana tengo una deformación insalvable: haber compartido diálogo con Espriu, Pére Quart, Josep Benet, Joan Brosa, María Aurelia Capmay, mi querida Montserrat Roig (innolvidable viaje a Leningrado),  mentes muy críticas con el resto de España; pero no estúpidas.  Por lo que respecta a Wert y Montoro, por mi parte, leña al mono hasta que hable inglés.

Y acabo esta carta, que empieza en toros y  concluye en teatro,  con un saludo a Fernanda Orazi. Te ví ayer en la Cuarta Pared,  en primera fila y no te quitaba ojo, como no se lo quitaba tampoco a Marianela, Alicia y Estefanía; Javivi, sin restarle méritos, confieso que me motiva menos;   en tí yo no percibí esa maldita indisposición  que, dices, casi te saca del papel. Vos sos grande siempre. Otro dia hablaré de Messiez, de Marianela Pensado, actriz que me fascina, y de todo el espectáculo; Palabras, que en definitiva,  es lo mío y rimas, que también es lo mio,  aunque Becquer me resulte un poco empalagoso. Todo sea por librarnos de la peste: la peste bubónica y la peste de los políticos.
Acabo de ver El rey tuerto, un milagro de teatro político en estos dias: un milagro de teatro a secas. Este texto, decía alguién a la salida, marcha solo. Vale, pero ese texto hay que escribirlo, dirigirlo y hallar un actor como el que hace de madero antidisturbios; así marcha "de solo" El rey tuerto. 

miércoles, 16 de octubre de 2013

ODIO A VALLE INCLAN Y A UMBRAL

Y los odio porque me acomplejan, porque me quitan las ganas de escribir. Lees, o ves, en el escenario a Valle Inclán o a Umbral y dices para qué seguir escribiendo, nunca llegarás a nada. Es lo que se llama un odio positivo, un maldito odio de  discriminación positiva. Y rencorosa.. Estreno a lo grande en el Español. Y apuesta fuerte de Natalio Grueso que merece ganar. Valle Inclán siempre es un desafío; y Tirano Banderas, más. Controversia en el patío de butacas, en el vestíbulo, en las tabernas de la Plaza Santa Ana mientras tomamos un refrigerio. Algunos recuerdan el Santos Tirano de hace cuarenta años de Ignacio López Tarso y el coronelito de la Gándara, de Manuel Gallardo. Y se elogia a un pérfido y enrevesado Emilio Echevarría.

  Y al hablar de Valle es inevitable hablar de Francisco Umbral: los botines blancos, la bufanda roja: dos dandis, dos iconoclastas. Si Umbral estudió tan a fondo a Valle  Los botines blancos de Piqué, fue porque a la vez creía estudiarse a sí mismo. Como le pasó con Larra, Larra anatomía de un dandi. Hoy en Majadahonda homenaje a Umbral y a Mortal y Rosa por reputados umbralistas. Es ya un tópico considerar Mortal y Rosa como el mejor  de su centenar de libros. Pudiera ser, pero Umbral tiene muchos "mejores libros"; sin ir más lejos, Un ser de lejanías, Los botines blancos de Piqué, El Cesar visionario.  A mí me salen, por lo menos,  veinte "mejores libros" de Umbral sin contar los miles de columnas de periódico. Me hubiera gustado verlo en este Tirano, como durante los dos meses que compartimos la crítica de teatro de El Mundo. De Mortal y Rosa recuerdo hace tres años a María Toledo, Echanove, Juan Diego; montaje de De Paco y escenografía de Loaysa en el Figaro de Salaverría. Nos llegaron muchas ayudas para un elenco así e incluso la Fundación sacó un viático sustancioso para otros menesteres umbralianos. Yo me ocupé de  la selección de textos, el reparto, la ficha artística  y la intendencia. Sobre todo la intendencia..

Muerto, el recuerdo de Umbral está muy vivo. Pero yo huyo del autor de las Ninfas, como de la peste. El deslumbramiento de  Umbral y Valle es mortífero para escritores y periodistas: aniquila a los imitadores como Picasso destruia los suyos en pintura: animales depredadores. Incluso cuando elogiaba, Umbral era un peligro. A mí me puso el prólogo a mi primer libro de versos, La frente contra el muro  y, aunque he llegado a publicar una decena, nunca he logrado ponerme a la altura de ese prólogo; Jaime Siles y Javier Alfaya dicen lo contrario, pero no estoy muy seguro de ello. Cuando se murió de muerte natural, todas las muertes son naturales,    su sucesor también natural, Raúl del Pozo, en la columna de El Mundo, tenía miedo de no heredarle. Yo nunca estuve en las quinielas y la sola remotísima posibilidad me daba pánico. Raúl me llamaba todos los dias y me invitaba a comer en el Puchero para averiguar posiciones. Y yo siempre le decía lo mismo: tranquilo, Raul; yo creo que no hay nadie mejor que tú; los demás no damos el perfil y PedroJ lo sabe. Cuando heredó, Raúl dejó de llamarme y de invitarme al Puchero; y ni una puta negita en su columna.

A Umbral le he escrito un par de libros que a mí no me gustan porque no están a su altura; pero a él le gustaban mucho. Sobre todo porque por uno de ellos, La escritura absoluta, su biógrafa la Caballé me tiró dos o tres cornados a la femoral. Desde este blog mando un abrazo a Raúl, a Antonio Lucas, a todos los umbralistas, a Aurelio y a Manu y Asunción. Y a María España, sobre todos. Umbral no morirá.

lunes, 14 de octubre de 2013

DUDAS ANTE "MI" MUSEO TAURINO. ¿EL FIN DE LOS TIEMPOS?

Hoy es lunes, dia de descanso para la gente de teatro. O sea que ni tengo obligaciones ni ganas de escribir de nada. Además, esto del blog no hay quien lo entienda. En algunas entradas las visitas se disparan y, en otras, incomprensiblemente,  descienden; por ejemplo, Qué pasa en Cataluña, de Chaves Nogales, ha tenido un nivel bajo comparado con otros. Que trata de España, titulo robado a Blas de Otero, tampoco rompió la barrera del sonido. O sea que nunca se sabe. Algún amigo me consuela; tranqui, apenas llevas un mes y ya has tenido visitas razonables y algunas espectaculares, y más 550 seguidores en Twiter. Acostumbrado como estoy en el Mundo a masas de lectores, sobre todo en toros, no sé lo que entienden mis amigos por espectacular y por razonable. Dedico el lunes, con las pocas fuerzas que me quedan de la mortal sesión de fisioterapia en la clínica dela APM, a organizar el desastre de mi biblioteca y a embalar los libros taurinos que van a ir al Museo Taurino de Colmenar Viejo; y a rescatar del fondo de los armarios dibujos y cuadros de toros, que también van a Colmenar. Soy un sobreviviente de rehabilitación y masajes y, como de costumbre en estos casos, Ana trajina y yo dirijo y contemplo: la viva imagen del patrón y del obrero, metáfora que estoy seguro le va a gustar mucho a Ana. No es  que yo sea un negrero machista, que acaso también; es que estoy cojo, cercano ya a la minusvalía. No es cosa de agravar mis insuficiencias con esfuerzos físicos sobrehumanos.

Pese a todo, experimento la tragedia de ver cómo se desmembra una biblioteca de unos 15.000 volúmenes, que hemos tardado 40 años en acumular . Los libros son crueles, necesitan su espacio, imponen su dictadura: o ellos o nosotros. No hay sitio para todos. En cada libro está una parte del alma, de  nuestras vidas. Durante años no se ha tirado nada, hasta el mínimo opúsculo, un prospecto, cuatro hojas mal encuardenadas, tenía un respeto y un hueco. Hay que empezar a seleccionar, no hay otra. Un dia escribí en uno de mis poemarios  que más me gustan y que diseñó primorosamente Sergio Ramírez, Indicios y desmemorias: "Creyó que el conocimiento le libraría de la pasión/   y descubrió la pasión del conocimiento". Sergio Ramírez era, y supongo que sigue siendo, un gran diseñador y muy buen pintor. Lo descubrí en la Universidad Politécnia de Madrid, muy joven , trabajando él de conserje y yo de jefe de prensa. Lo rescaté para el arte y para el diseño en lo que es un verdadero talento. No sé que habrá sido de él,  pero Indicios y desmemorias me lo ha traido a la memoria. Diseñó  para Akal y para Molinos de Agua magníficos libros. Y le preparé una exposición , creo que en Orfila , con un prólogo del Rector de la Politécnica, Rafael Portaencasa, que no sabía nada de pintura. Portaencasa tampoco sé si sabía de política, pero una vez me lo encontré en un hotel de la Habana y se puso muy nervioso. Portaencasa se portó muy bien conmigo,  sobre todo a raiz de que yo lo viera en Cuba y él no me viera a mí;  se decía que era del Opus. No sé qué haría en Cuba; sólo sé lo que hacía yo.

Acumular una biblioteca es una obra de toda la vida y, de golpe,  ese montón de sentimientos, privaciones, lecturas e insomnios se torna  doloroso cuando se agrietan en una tarde. Lo hecho, hecho está y no me arrepiento de que parte de mi vida retorne a Colmenar Viejo donde he vivido y pienso seguir vivido momentos maravillosos. Cerca de  dos mil volúmenes de literatura taurina; me quedo con medio centenar para no cortar de golpe con mis aficiones . Tengo la sensación de que con ellos se va una época; como si los toros, la corrida, memoria histórica y cultural de este país, se fuera al carajo. Como si el destino de la Fiesta fuera ese: el Museo de la Historia. No quiero ponerme melancólico, pero presiento que con esos centenares de libros se van cientos y cientos de tardes, de artículos, de polémicas. Hasta aquí hemos llegado y lo que tenga que pasar pasará. Los toros me han dado muchos amigos, grandes emociones, alguna áspera controversia. Tantos amigos   que, cuando dentro de dias,  aterrice en México para hablar de teatro con la UNIR, Ignacio Amestoy y otros colegas,  algunos  me esperarán  en el aeropuerto para hablar de toros como hacemos en los aledaños de las Ventas por mayo  y en el Arenal de Sevilla por abril.
Ana sigue empaquetando libros, sin gran pena, porque nunca tuvo pasión por los toros. Mataría, en cambio, si le tocan su biblioteca de narrativa, española y extranjera, que es lo que más ocupa de la casa.  A cada libro le echo  una mirada que  solo yo sé descifrar: "estos, Fabio, !ay dolor! que ves ahora/ campos de soledad, mustio collado". No tardando mucho las baldas de la librerias y las paredes, serán un erial. Porque con los libros, mandamos también al museo de Colmenar casi un centenar de dibujos y de cuadros taurinos; no es que sea el Museo del Prado, pero hay piezas  notables y la mayor parte de ellas dedicadas.

En estas reflexiones, me sorprende una llamada de Luis Santos, viejo amigo de complicidades y aventuras. Luis es muy alto, muy alto y se casó con  Pilar de Miguel, buena  amiga mia, que  era muy baja, muy baja y muy guapa y muy roja. Luis me dice que quiere publicar algo y que le oriente. Luis me dice que ya no sabe dónde está; de sus viejos referentes políticos, Althuser enloqueció y estranguló a su mujer, cosa que Luis Santos no ha hecho con Pilar. Poulantzas, dice, se tiró desde un séptimo piso, circunstancia que a mí me había pasado inadvertida o he olvidado. Quedamos en vernos. Luis era de los pocos que no confundía el marxismo científico de Althuser con un difuso humanismo que era por donde el revisionismo carrillista queria colarnos    -y de hecho lo coló- la ortodoxía althuseriana: una visión y una versión muy española.

Algunos amigos me piden que publique en este blog mis extinguidos Sonetos de la impostura que, en los 80  por poco me echan de España. Haré algo mejor y más sorprendente, palabra. Pero antes, para hacer dedos como los pianistas, quiero recuperar un poema taurino-cachondo de los 90 dedicado a mi amiga Laura Tenorio en un rifirrafe  que tuvo con el torero Oscar Higares. Laura se hizo ganadera, de Martín Peñato, y supongo que sigue siéndolo, además de tuitera muy activa y estudiosa de grandes disciplinas. Laura me contó la historia, un poco bronca, de Oscar Higares y yo lo resumí así: Higares: "tú Tenorio?. Vamos anda/ Me duras un muletazo;/ me doblo, te doy distancia/ bajo la mano, te aprieto/ me ciño y, sin despeinarme/ te domino y te someto". Respuesta de Laura: "Tú un muletazo?. Lo dudo./ Gurripinas y mantazos./ ¿Doblarte?./ Eres muy alto,/ !Jesús que tío tan largo!/; parece un espantapájaro. / Antes de que te des cuenta/ chopo, poste, vara larga/ te meteré un tornillazo/. El son de esta sevillana/ merece toreo grande./ O un cante por soleares/ o un suspiro de Triana/ Y no un chotís verbenero/ de un matador teatrero/ esaborío y cateto". !Va por tí y por Triana!. Si te gusta este recuerdo , difúndelo en Twiter donde tienes tantísimos seguidores. Y no vuelvas al periodismo; esto está peor que lo de Oscar Higares. 

sábado, 12 de octubre de 2013

QUE PASA EN CATALUÑA?. CHAVES NOGALES SE LO PREGUNTABA HACE 80 AÑOS

Ruido de aviones, cazas como rayos por el cielo de Madrid. Luego, creo, el dibujo de una bandera por cuyo coste, en detrimento de sanidad y alimentación, se pregunta la tuitera Crisgavit. Viene fuerte esta chica con ironía fina y sin demagogias. Creo que  seguiré.  No sé si desfilará la Legión con la cabra que a mí me gustaba mucho: la cabra. También Felipe Alcaraz: sagazmente contrapone el separatismo centralista al separatismo periférico. Llamo a Felix Población para felicitarle por su Diario del Aire que recomiendo: los tormentos de Irma, su calvario agonizante.

Me viene al hilo de estas reflexiones en el  Dia de la Hispanidad, el libro de Chaves Nogales, editado por Almuzara. Toro Mítico, Berenice, Almuzara; la editorial de un exministro ilustrado del PP con Aznar, Manuel Pimentel. Cada dia un libro, más o menos; para tiempos de crisis no está mal. Que pasa en Cataluña?   es un libro reportaje, como casi todos los suyos,  de Manuel Chaves Nogales, muerto prematuramente y en el exilio, que Almuzara está recuperando: La ciudad, Sevilla, tan referente como  Ocnos, de Cernuda. Y La bolchevique enamorada, La agonía de Francia, Andalucía Roja.... Chaves Nogales es algo más que el biógrafo de Belmonte, biografía que lo lanzó a la fama y creó un estilo de escritura taurina.
Más ruidos de aviones,  por el cielo de Madrid que turban la tranquilidad. Prefería otros años la ofrenda de flores en el Pilar y la jota aragonesa. Y la corrida de toros, aunque nunca tuve la suerte de ver una faena de Finito de Córdoba  que cuenta hoy en El Mundo, Zabala de la Serna. Por faenas menos relumbrantes, yo le daba a Finito de Sabadell, su nombre más torero: Juan Serrano.

En 1931 Chaves Nogales viajó a Cataluña; volvió en 1936 y entrevistó al presidente de la Generalitat, Francés Maciá. De esas entrevistas nació ¿Qué pasa en Cataluña?, la pregunta eterna que no acabamos de responder. El  Duque de la Victoria aportó una solución militarista, una salvajada más bien: "Cada 50 años hay que bombardear Barcelona". En la Guerra incivíl (acuñación linguística de Santonja) del 36 Barcelona, inmersa en un guerra civil interna, fue machacada por lo aviación franquista. Ya han pasado más de 50 años y a nadie se le ha pasado por la imaginación repetir tan bárbara experiencia que, por otra parte, no conduciría a nada.

Chaves Nogales, el periodista sevillano, muerto en Londes en 1944, no veía clara "la cuestión catalana". Pero era un gran reportero  y buscó fuentes fiables qee contrastaba minucosamente. La política usada por el resto de España con el soberanismo catalán es, habitualmente, de palo y zanahora; o si se prefiere, frenazo, marcha atrás y luego un acelerón. La conclusión más clara que saca Chaves Nogales es la siguiente:   "el catalanismo es  una rara sustancia que se utiliza en los laboratorios políticos de Madrid  como reactivo del patriotismo, y en los laboratorios de Cataluña como aglutinante de las clases conservadores". En esas seguimos, más el hedor de la corrupción política que nunca fue tan pestífero como ahora. Ni siquiera con el estraperlo de Lerroux.

Qué pasa en Cataluña?. Una interrogante que algún dia hallará la despuesta adecuada. Aprovechando la calma chicha  que se ha apoderado de la mañana patriótica, hispánica y legionaria, concluyo la novela aplazada de la novela de Felipe Alcaraz Tiempo de ruido y soledad; hermoso título aunque de resultados insuficientes, Es el primer título de una trilogía titulada La disciplina de la derrota, magnífico nombre.  Es mejor que las novelas de juventud,  en Akal, cuyos títulos, demasiado ideologizantes, frenaban un poco : Informe de un toma de partido en literatura o Sobre la autodestrucción y otros efectos. Poltíticamente, en una novela política y testimonial, no hace grandes descubrimientos; pero está bien que explicite las complicidades de PSOE y PP para  tener a España en la inopia. Se nota cierta querencia a un personaje que a mí me parece un poco tenebroso, aunque aglutine en su contra, las fuerzas residuales del franquismo: el juez Garzón.

Placidez en un sábado festivo. Esta tarde me dejaré de políticas  y desfiles lejanos. Entraré en un libro de  un joven poeta , Javier Magano, cuyo título me atrae mucho: La hora del lobo; una metáfora del momento político?, alguna duda existencial y personalísima?  No sé; pero me atrae; poemario, artículo o novela que no agarre por el título, es tiempo perdido.  Espero Serpentario, también de Alcaraz y también de Almuzara.

viernes, 11 de octubre de 2013

MIGUEL HERNÁNDEZ ESTRELLA DEL COSSIO

A  petición del personal recobro el tema Miguel Hernández, perito en lunas y perito en toros el el Cossío. Hoy sabemos  que fue una estrella anónima  de la gran enciclopedia, la biblia de los toros; vivió de ello unos años y le salvó la vida, aunque luego la perdiera de cárcel en cárcel. Me recuerda la promesa un tuitero a la salida de Master Class, en el Canal, conmovidos todavía por Norma Aleandro.

 En los estrenos de estos dias aún saltan chispas de mi crítica a Agélica Liddell: división de opiniones con más pañuelos a mi favor. Me dicen: "con Angélica te ha pasado lo mismo que con José Tomás, del cielo a los infiernos". Bueno, de acuerdo....Sólo que a mí no me ha pasado nada. Y no les he condenado a ningún infierno, si acaso sólo al purgatorio. Reconozco el tirón y la mística de ambos, pero no me gusta que hayan pasado de la pureza de una conciencia ética a la trampa de una conciencia financiera.Y me alegrará que Israel Elejalde y Luis María Ansón, máximos fans de Angélica, continúen la cruzada empezada. Yo tenía ganas de hacer un breve ensayo comparativo sobre Angélica y Rodrigo García; pero Wendy, lo último de esta mujer furiosa, me ha quitado las ganas a favor de Rodrigo García.

Volviendo a Miguel Hernández y al Cossio y las posibles biografías de toreros que escribió para la enciclopedia, la historia es sabida. En una conferencia en Murcia me arriesgué, por un análisis  estilístico mio (poco fiable) y por una endeble rumorología oral, a aventurar  posibles autorías miguelhernandianas: Tragabuches, Lagartijo, Antonio Reverte y Espartero. Desde entonces algunos colegas han dado por cierta mi hipótesis y, sin citarme y sin encomendarse a Dios ni al diablo, lo han lanzado por ahí. Que conste que no asumo el riesgo. José María de Cossío se negó siempre a dar datos concretos, aunque es evidente que las 250 pesetas que le pagaba al mes, Miguel Hernández las tendría que sudar en aquellos años prebélicos.

 Recopilaba datos, redactaba breves reseñas y era un plumilla para todo. Cossío fue la salvación de Miguel Hernández, un pastor ilustrado en los clásicos y tocado por la gracia poética; y más tocado aún, cuando llegó a Madrid en alpargatas,  por la genial Maruja Mallo, la pintora que se ponía el mundo y los hombres por montera. Miguel Hernández, acostumbrado al plácido amor de Josefina, se embraveció en las tormentas de Maruja.  Razones para pensar que Tragabuches, Espartero, Reverte y Lagartijo puedan ser de Miguel Hernández?. A falta de datos concretos, me atrevo a aventurar algunos rasgos temáticos y estilísticos; el romanticismo bandolero de Tragabuches que, tras tirar por la ventana  a su compañera y degollar a a su amante, se echó al monte; se convirtió en uno de los 7 Niños de Ecija; Reverte es la melancolía del fracaso, un gran torero aniquilado por las enfermedades y las cornadas; Espartero es el héroe popular muerto por un miura; y Lagartijo es el triunfo, la gloria, la perennidad del arte. A mí, de ser ciertas estas  suposiciones es la biografía que menos personal me parece de Miguel.

 El poeta oriolano ya había inciciado su transformación ideológica hacia el Partido Comunista y en esos años prebélicos de violencia,  los sentimientos de peligro, de muerte presentida, gloria amenazada y de sangre sacudían su vida y su poesía. Mientras, Josefina su novia casta y pura, era barrida por el vendaval erótico de Maruja Mallo, una aparvadera desbocada. El catedrático José María Balcells afirma que Hernández entró en el Cossío por recomendación de los amigos, pero que don José María apreció pronto sus conocimientos taurinos aprendidos en capeas y tientas con su amigo  Carlos Fenoll que quería ser torero.

Lo irrefutable es que José María de Cossío le quitó el hambre a Miguel Hernández en Madrid con sus 250 pesetas al mes y que, concluida  la guerra, logró que le conmutaran la pena de muerte intercediendo ante Franco y sus parodias de tribunales. De poco sirvió pues enfermo, el peregrinaje carcelario y la criminal falta de cuidados médicos y alimentarios acabaron  con la vida de Miguel. José María de Cossío hizo lo que pudo. Reconozcamos su generosidad y su importancia en la vida de Miguel, un grandísimo poeta mártir. Pero eso es otra historia.    

martes, 8 de octubre de 2013

CARTA ABIERTA A JUAN VICENTE HERRERA. Y POSTDATA A LASALLE.

Corregido error de fechas, sept por oct. Mientras no confunda a Calderón con Tirso todo vale
Dia duro; roto el don apacible de un verano campestre, Madrid impone su tiranía inhumana. Teatro a tope; incluso los lunes hay estreno; el gozo de El crédito; Jordi Galcerán de nuevo en estado de gracia; y Gerardo Vera; y, sobre todo, Carlos Hipólito y Luis Merlo. Esta comedia se hará tricentenaria. Rompo el encanto del verano campestre sin haber podido adivinar el misterio de una higuera muerta en Julio, resucitada, en todo su esplendor, en Septiembre. La doctora Freitag de la APM y su brazo armado, Cristina, tratan de ponerme a punto mis huesos y mis músculos deteriorados  desde hace tiempo. Nada que no tenga arreglo. Peor está el Borbón y ahí sigue agarradao al timón. Implacable el brazo armado de Cristina; la gente recibe su disciplina con una sonrisa y sin miedos; no lo entiendo muy bien, pero si la vieran se explicarán por qué. Voy a empezar la carta a Juan Vicente Herrera, presidente de la Junta de Castilla y León porque si no me me lio, para hablarle de Caneja, al que admira, y otras cosas. Antes un breve preámbulo. Teatro a tope, como digo. He visto el otro dia El caballero de Olmedo, turbador en algunos momentos. La crítica para El Mundo ya está entregada. Reunión con Robert Muro y con Pedro, un fichaje de Robert, que puede ser un crack, para la distribución  de Que trata de España. Conclusiones; todo admite mejoras, pero este oratorio poético-flamenco ya está armado de lo que da fe el público asistente a la sala II del FG. Un equipo sólido articulado  en torno a Ramón Fontseré. Y los poetas son los que son; mucho tiempo pensando y repensando una selección inapelable que por supuesto podría ser otra, pero es la que da sello al espectáculo; el sello que yo desde hace tiempo he querido darle. Como decía Albert Boadella y Carlos Alvarez en el estreno, el título, expropiado a Blas de Otero, y los poetas elegidos alejan cualquier sospecha de "españolada" folclórica. Aplazamos sine die; otros proyectos que, con buen criterio, Robert me frena. Ahora hay que estar en lo que estamos; si no me paran, me pierdo.
Sobre la difusión de Que trata de España, Robert Muro tiene ideas claras y ambiciosas; tengo que comentárselo, aprovechando esta carta,  a Juan Vicente Herrera; a Gonzalo Santonja, que se ha ofrecido a ser puntal del espectáculo, ya se lo hemos comentado y tiene proyectos para Castilla y León que estaría bien fueran reforzados por el presidente de la Junta; qué mejor defensa de una España plural y unitaria que los grandes poetas, en castellano, catalán, euskera y gallego de  Que trata de España. Aunque estremezca  escuchar el soneto de Quevedo.

Carta a Juan Vicente Herrera, presidente Junta de Castilla y León

Estimado presidente y canejista de pro:
Me sorprendió hace tiempo, en una cena en El Mundo, en la que el protocolo nos puso en mesas cercanas, su afición por Juan Manuel Diaz Caneja  y el buen  conocimiento de su obra; no es frecuente    hallar en un político una afición por uno de los pintores, secretos en cierta medida, un pintor de culto para la crítica más exigente. Caneja es el pintor de Castilla, de la Tierra de Campos; pero es mucho más: es el postcubismo,  la independencia, el pintor único por encima de modas o de consignas. Como usted sabe lo mejor de la obra de Caneja está en Palencia, en la Fundación. Y en el Museo de León al que, como albacea testamentario de Caneja y de Isabel, envié 60 cuadros. Caneja está también en el Reina Sofía, el Ivam y el Museo Municipal de Madrid. No es la colocación de su obra lo que preocupa al presidente de la Fundación, Alfonso  Polanco, alcalde de Palencia, al presidente de la Diptación, José María Hernández, y al Patronato cuya reunión celebramos el otro dia; son las estrecheces por las que atraviesa la Fundación, víctima como todo el mundo de la crisis. El otro dia recibimos con alborozo el anuncio de una favorable disposición de la Junta que usted preside, así como del Ministerio de Cultura, pero muy inferior a la cuota que tenían asignada desde que se inauguró la Fundación. Ha sido vital para salir de algunos atolladeros, pero hagan ustedes un  esfuerzo, estírense que, en lenguaje llano decimos por Castilla. Caneja lo merece y el objetivo de la Fundación de ser el Centro Cultural de Palencia y  un de los más importantes de Castilla y León lo merece. Me ofrezco, con otros intelectuales de Palencia y el coordinador de la Fundación Rafael del Valle, a tener una reunión con usted cuando su agenda se lo permita. La programación tampoco es problema para que la Fundación Caneja tenga una mayor incidencia en el tejido social, aunque naturalmente todo es mejorable. Y será mejorable en la medida en que cuente con medios de los que hoy carece. La Comisión Cultural Asesora que se ha nombrado siempre contribuirá a esta mejora en coordinación con el Patronato y el actual director Rafael del Valle. Se avecina un Ere que, además de los problemas laborales en una Fundación que cuenta solo con tres empleados, acarreará dolorosos  problemas humanos.
Celebro, señor presidente, lo celebré siempre, su afición por Caneja, su pasión canejista. El pintor palentino no es inferior a Esteban Vicente, cuya Fundación se desenvuelve con unos márgenes envidiables. Yo diría que a Caneja, el pintor del silencio, le ha faltado marketing; o como decía el inolvidabel Francisco Umbral, le ha faltado pasarela.
Reciba un  saludo cordial y en los asuntos canejianos y en mi afecto personal, téngame siempre a su disposición

Postdata a Javier Lasalle, secretario de Estado.
Y para usted, señor Lasalle, también un saludo. El mundo del teatro y la cultura esperaba mucho de usted, acaso para compensar los recelos respecto al ministro señor Wert. Pero mi atrevimiento para dirigirme a usted tiene el mismo origen que la carta anterior; la Fundación Caneja de la que ese Ministerio, con la Junta de Castilla y León, la Diputación y el Ayuntamiento de Palencia fueron impulsores y principales valedores. Haga usted un esfuerzo, Caneja como usted sabe muy bien, es un pintor de culto, un gran pintor. Entérese de cómo van las cosas de la Fundación, a menudo paralizadas por la monstruosa maquinaria burocrática. Da gusto escucharle a usted hablar, exponer su claridad de ideas... En Almagro, su cita de Passolini, nos  conmovió. No en vano, más que cine, que también,  a mi me interesan Las cenizas de Gramsci,  libro clave, traducido por Angel Sánchez  Gijón, padre de Aitana, en su exilio romano. Ese libro me marcó poética y políticamente. Y el teatro de Passolini. Otro dia hablaremos de teatro; la gente del Fernán Gómez está preocupada por una problable privatización; ¿cual sérá el próximo?. Puede que esto quizá no sea de su negociado, pero haga lo que pueda para impedir desaguisados que se avecinan.   

domingo, 6 de octubre de 2013

LA CORONACIÓN DE FANDIÑO TENDRÁ QUE ESPERAR

No hay dia felices, pero sí algunos que se aproximan a la felicidad. De haber abierto ayer Fandiño la Puerta Grande Alcalá, pues todos contentos. Esta Feria de Otoño, con los adolfos como remate, se había programado a mayor honra y gloria de Ivan Fandiño; o la había programado él, que viene a ser lo mismo. Los adolfos, muy serios, con trapío y con pocos kilos, no dieron más de sí: pitones astifinos y mucha leña y un cuerpo musculado y recio. La falta de raza hundió todas las apariencias. Hubo  un toro, el cuarto, que hubiera soñado Fandiño para su consagración definitiva; pero ese toro le tocó a Ferrera, que ya no tiene nada que conquistar y está consagrado.

Casi todo el dia fuera de casa. Javier Cacho nos había invitado a Ernesto Caballero y a mí a comer en Casa Sierra. Javier Cacho es abogado experto en los derechos sanitarios de los animales y, por lo tanto, experto en los derechos de los toros. Tengo que preguntarle si le alcanza a su especialidad  los derechos de los toros afeitadas, descastadoa, cojos y rencos. La comida,  buena;  Ernesto Caballero es un neófito en cuestiones taurómacas y cumplimos solo a medias un acuerdo previo: no  hablar ni discutir de teatro. Pero siempre ocurre lo mismo; hablamos de teatro y mucho, ante la perplejidad de Javier Cacho que quería hablar de toros: hay pasiones que no se pueden ocultar.
Me descolgué de ellos nada más empezar la corrida y alcancé un compromiso: la próxima invitación será mia en La Quimera, el reino de Antorrín que hoy estará triste porque su amigo Fandiño se ha quedado donde estaba.   Vale; no se conquistó Zamora en una hora. A Fandiño no hay que forzarle ni exigirle algo que, a lo peor, aún no está en condicones de dar. Ernesto Caballero, aunque no sepa mucho de toros, sabe del malditismo de la fama: ha llegado donde está, y sin discusión, tras haber pasado el calvario del teatro independiente sin un puto euro que llevarse a la boca. Yo le recuerdo de los tiempos heroicos y me parece que ahora, desde la cumbre del María Guerrero, no ha cambiado nada. O casi nada, tampoco hay que exagerar.
Hemos alcanzado un acuerdo; puesto que Javier Cacho, el defensor de los derechos sanitarios  de los animales, ha apoquinado todo lo apoquinable, yo invito en la Quimera  la noche que nos venga bien y que El Pescao esté en vena. El Pescao es un genio del flamenco, un marginal, un dinamitero en las raices del jondo: un crak como se dice ahora. Un personaje de García Lorca, que hablaba de los sonidos  negros del cante. A ver si en Palencia se enteran de una vez, que tienen un genio, que en Palencia nunca se enteran de nada. Un hombre que, mirando al guitarrista,empieza su lamento gitano y telúrico afirmando que para hacer bien una seguiriya hay que "haber jugado al escondite con el hambre" es de otro planeta; del planeta lorquiano de Manuel Torre, de Joselito,  Belmonte, Rancapino, Camarón y toda su descendencia. Como no queríamos hablar de teatro no le digo nada a Ernesto Caballero sobre el Pescao; se lo diré la noche en que vayamos a la Quimera, si el Pescao no pega la espanntá, porque en eso se parece a Rafael de Paula.
Unos San Isidros gloriosos, en el desaparecido Café Soto  Mesa, Pablo Hermoso de Mendoza, que no sabía nada de flamenco y supongo que sigue sin saberlo, se quedó fascinado por la copla de Clara Montes y por el quejío de El Pescao. Eso fue hace, por lo menos 20 años; como yo era el  muñidor de aquellas noches fastuosas y tormentosas conseguí que la estrella de la inauguración de la finca de Hermoso fuese el Pescao. No sé qué pasó, pero desde entonces el genial caballista no quiere hablar  del Pescao y éste no sabe no contesta. El Pescao es así . Tampoco sé lo que pasó anoche en la Quimera donde la gente de Que trata de España, se fue a celebrar no sé qué con el Pescao que los esperaba a la puerta del Fernán Gomez: Hasta la VV, mi adorada Nausicaa, se vió metida en el embrollo. No sé cómo ha sido la última representación hasta que me llama Robert Muro y me dice: genial, lleno. Se me va el texto de pantalla y pongo un SOS a Loaysa que me dice, eres un manazas, sabes escribir, pero   nunca aprenderás tecnología. Falta de respeto de un escenógrafo a un crítico y autor; pero a distancia  me arregla el desaguisado de mis manazas; y aqui tienen ustedes  la crónica recuperada de este dia y que ustedes lo pasen bien. La gente de Que trata de España, sigue la farra por los cafés de Madrid donde me he dejado media vida. Que no maltraten demasiado a Nausicaa VV. La edad me ha hecho virtuoso y estoy en casa, esperando una peli del Oeste. Descorcharé  un buen crianza de Ribera del Duero. No me importa agotar las existencias porque Javier Cacho me ha prometido unas botellas de las mejores bodegas.

sábado, 5 de octubre de 2013

GRANDE MIO CID: DEL ÉXTASIS AL GATILLAZO

Regreso de un viaje fugaz a Palencia, Fundación Caneja, reunión del Patronato. Luego vino de Cigales con los amigos, concluidos los trámite burocráticos y los políticos de las diversas filiaciones, cada uno a su olivo. Buen Cigales y buen verdejo. Lo contaré todo, todo lo que se puede contar , un dia de estos. Regreso a las cinco de la tarde. Pedro, el conductor del Ayuntamiento, es un  Fernando Alonso de la carretera; pero muy sensato. Tanto traerme y llevarme el coche se sabe de memoria el camino. Esta breve introducción va dedicada a los aficionados de Palencia que se metieron a los tendidos de las Ventas, cuando yo aún estaba en camino. ¿Toros o Teatro?. ¿El Cid -que siempre me atrae más que Fandiño- o Angélica Lidell en el Canal. Tomo una decisión salomónica: toros en el Plus y luego teatro. Tiempo medido, pero suficiente.

Era la tarde de Fandiño, elevado al pedestal de los héroes por sus dos ajustes en Otoño de las Ventas, y resultó la ascensión a los cielos de Manuel Jesús el Cid, por una faena sencillamente perfecta y con aroma viejo; luego, a la hora de matar, pegó el gatillazo; se le aflojó  la espada maldita y llegaron las angustias y  la bajada a los infiernos como tantas otras veces. El Cid mata cuando nada tiene que ganar y pincha cuando tiene el oro, el moro, la gloria y la inmortalidad en sus manos. El Cid le tiene miedo al triunfo: o sea, mentalidad de perdedor. Hace años vengo teorizando sobre este sentimiento  del gran torero de Salteras. Ayer creí que ese fatalismo acabaría y que la Puerta Grande de Alcalá  terminaría por quitarme la razón; nada. Se cumplió el destino maldito, el destino fatal que no es solo destino, sino oscurecimiento de la mente. El destino al fin y al cabo lo trazamos nosotros. A Manuel Jesús se le encoge el brazo, entra a destiempo y mal. Y otra cosa: con la casta derrochada por el buen toro de Victoriano del Rio ¿a quién se le ocurre entrar a matar en la suerte contraria?. Si el Cid hubiera tenido la mente clara, le habría dado los medios. Quizá estaba todavía en las nubes colgado  de sus naturales sublimes, o de sus verónicas e incluso de sus derechazos..Quizá estaba en la nubes, emborrado de toreo y olvidado de que una  faena de esas dimensiones colosales requiere también una estocada perfecta o, por lo menos, letal. Los artistas son así y se les olvidan estas cosas. O sea el gatillazo, despues de una faena amorosa impecable, unos adornos, una preparación de amante ensimismado y fogoso.

Hace años escribí que Manuel Jesús el Cid era la mejor izquierda de España, y estaba en activo José Tomás. Hoy lo ha reconfirmado en las Ventas; en el Otoño dorado del tiempo melancólico y en el otoño más dorado aún de su madurez torera. La temperatura de un gran tercio de quites de un aguerrido Fandiño por gaoneras y  la réplica por verónicas de el Cid, marcó la diferencia entre los dos toreros: un guerrero y un sacerdote, la fiereza de uno y la solemnidad del otro. La verónica es, en toros, lo que la soleá en el flamenco: un palo primordial. Todo emocionante y perfecto. Todo menos la espada...Y no echemos la culpa a la mala suerte. Es que el Cid tiene miedo al triunfo. 

jueves, 3 de octubre de 2013

CRITICA LIBERAL PARA ILUSTRADOS OTOÑO, LAS VENTAS (I)

Desde que Carlos Abella me pasó la programación cultural de Otoño, supuse que la exposición de Isabel Rivas, era una de las cosas que más iba a gustarme de la Feria; a salvo las enormes faenas de los diestros, que tienen todos mis respetos. Ayer no hubo faenas enormes ni siquiera medianas; los novillazos del Ventorrilo, toros como mandan  cánones abusivos para los pobres novilleros, billete chico, si llegan a verlo, y novillotes grandes.  Jiménez fue aplaudido y en algunos momentos, muy pocos, "oleado" que decían los viejos revisteros; Diego Fernández fue el que mejores vibraciones me transmitío: un clasicismo en agraz y todavía frágil: y el gesto de brindar al herido Sergio Felipe, en cuyo lugar entró en el cartel, la muerte de su primer novillo; Juan Ortega recibió del sexto más palos que una estera y estuvo más tiempo en la arena o por los aires que de pie. A estas horas su cuerpo debe de ser un cónclave de cardenales: la letra a palos entra. Tanto en Arnedo como en Otoño, echo de menos a un novillero que me dicen es muy bueno y está pasando un calvario para vestirse de luces. Se trata de El Mani y yo le recuerdo por un rasgo que tuvo con el equipo de Alvero y Ceniza, un texto que me pusieron en la Abadia el año pasado y que está destinado, dios lo quiera, a echar a andar por los caminos de España: el Mani nos prestó un estoque que Isabelle Stofell, al simular la suerte de matar, usó al revés, con la curva hacia arriba. Eso no quita su gran calidad de actriz: inocencia de una guiri con aire de Ava Gardner. Aunque solo sea por eso, a mi me gustaría ver al Mani en los carteles y a hombros.
 Isabel Rivas ha titulado su exposición de fotografía  Rincones y personajes de las Ventas y, como Dominguito, hijo de Domingo Dominguín, se sabe todos los recovecos de la Monumental del Espíritu Santo,  algún apoyo habrá prestado a Isabel Rivas. En esas fotos, llenas de periodismo y llenas de arte, reside el misterio y la memoria del coso madrileño. Para desentrañar esos laberintos, en amigable charla itinerante, está el hijo del mayor de los domiguines, uno de los mitos de mi juventud, y que sabe de Las Ventas tanto como de las zonas oscuras de su familia; escribió  Dominguines contra dominguines   y el título lo dice todo.

Mientras en las Ventas la tarde se va despacio dando una larga torera sobre el mar y los arroyos, el  caballero de Olmedo en la sala Guirau, alancea toros y se enfrenta a su destino. Para tardes así, mejor en el teatro; las butacas son más cómodas. Heroica  la cruzada que ha desencadenado la valiente carta de Elena Salamanca en defensa de los aficionados agredidos por la horda. !!Chapeau!!. Pero eso o dbe hacernos olvidar las corruptelas y vicios de la Fiesta. Hay enemigos externos y evidentes; pero también los hay dentro: el Caballo de Troya, que se dice. Pese a todo, !!chapeau!! por la carta a las autoridades competenes ( incompetentes); con un par: como una Juana de Arco de los toros.

Tirso y Calderón de la Barca contra javier villan.

Dia de transición reposado y apacible si no fuera por la inmediatez de un viaje a Palencia y por el ceño que me han puesto Calderón de la Barca y Tirso de Molina por una cita errónea, dios y los tuiteros me lo perdonen. Ocurre que una sentencia inapelable ",quien tal hace que tal pague" se la atribuí a Calderón siendo de Tirso.  Y ocurre que llueve sobre mojado y no sé porqué ando siempre en líos con estos dos frailes, lumbreras de nuestro Siglo de Oro. No debiera ser cosa de mayor importancia, pero siendo yo tan quisquilloso con los demás, no estaría bien que ahora escondiese la oreja como puta. El dia apacible, antes de emprender un viaje fugacísimo para asuntos de la Fundació Caneja, estaría justificado por la entusiasta reacción del público en la Sala II en Que trata de España. Lo inexplicable de esta segunda confusión entre Tirso y Calderón tiene menos explicación; en tiempos, cuando era un seminarista recental de apenas 16 años hizo un extenso trabajo de 20 folios  sobre El condenado por desconfiado, eje de la cuestión sobre el libre albedría, la salvación etcc. O sea que a Tirso, memoria y a Calderón casi de carrerilla.

Alguna fuerza interna o externa me conduce al laberinto oscuro, acaso por mis descreencias. O sea que descomulgado estoy, más por el ceño de Tirso, que ha sido el expropiado, que por rencores de Calderón de la Barca. Puede que, aparte de ceñudos e incluso morrudos, ambos estén un poco celosos con lo que está ocurriendo hoy en el Fernán Gómez; Lope en la sala Guirau con El Caballero de Olmedo    y una parte de Quevedo, la más dolorida y patriota de aquel genio estvado y cojitranco en la Salla II: "miré lo muros de la patria mia". La primera se debe a la capacidad de riesgo y el talento de mis amigos Mariano de Paco y de Eduardo Galán; no puedo estar en el estreno como era mi deseo, pero lo veré mañana o pasado, que ya tengo entrada antes de que se agoten, si se agotan, y syo tengo mucha fe en De Paco y en Galán. Quevedo espera llenar con lo que le sobre a Secuencia 3 y Lope. Lo único en común entre El caballero....y  el soneto de Quevedo, es que de ambos, pasillo por medio,  firma  la escenografía David  Loaysa. Y para colmo empieza la Feria de Otoño en la que quizá también cite a Calderón con un verso raro que escribió sobre toros. De momento lo que más me interesa es la exposición de Isabel Rivas, en la sala Chenel, Rincones y personajes de las Ventas. Hasta pronto.